En mi post anterior decía que para no realizar un nuevo papelón y evitar un nuevo ridículo internacional los equipos ecuatorianos, siendo más preciso El Nacional y Deportivo Cuenca debían conseguir un milagro, y este último lo logró en un partido maravilloso donde fueron enormemente superiores a su rival, el Deportivo Anzoátegui y con una brillante actuación de su delantero estrella Rodrigo Texeira, quien a ritmo de samba puso a bailar tanto a rivales y a compañeros.
El encuentro llenaba de presión a hinchas “morlacos” quienes sabían que su equipo debía conseguir algo épico, ¡y lo hizo! Sus jugadores mostraron grandes jugadas, lujos y se ganaron el aplauso de los presentes.
¿Será que el Cuenca seguirá mostrando ese nivel en la Libertadores?, ojalá, por el bien del fútbol ecuatoriano que tiene como una única esperanza a la Liga de Quito, campeón defensor de la Copa. De seguir con ese gran nivel como el que se mostró contra los venezolanos se puede decir que tenemos “Cuenquita” para rato… y ahora que se viene Boca ya no asusta tanto.
El encuentro llenaba de presión a hinchas “morlacos” quienes sabían que su equipo debía conseguir algo épico, ¡y lo hizo! Sus jugadores mostraron grandes jugadas, lujos y se ganaron el aplauso de los presentes.
¿Será que el Cuenca seguirá mostrando ese nivel en la Libertadores?, ojalá, por el bien del fútbol ecuatoriano que tiene como una única esperanza a la Liga de Quito, campeón defensor de la Copa. De seguir con ese gran nivel como el que se mostró contra los venezolanos se puede decir que tenemos “Cuenquita” para rato… y ahora que se viene Boca ya no asusta tanto.
Fotos: www.futbolred.com
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